En la última semana de noviembre los socios de Gimnasia tendrán que decidir sobre quién gobernará al club por los próximos tres años, con la novedad de las últimas horas que el actual oficialismo encabezado por Mariano Cowen comunicó que no se presentará para una reelección.
La noticia la actual gestión se la oficializó a los socios vía mal el domingo por la noche cuando envió el resultado del último ejercicio económico-financiero que será puesto a consideración el jueves 30 de octubre a las 19. La decisión venía siendo meditada por un desgaste que se produjo en los últimos tiempos en el cuerpo directivo, potenciado por malos resultados deportivos (Gimnasia lucha por la permanencia), inhibiciones que caen sobre el club, atraso en los sueldos que derivan en un caldo de cultivo demasiado espeso.
A poco más de un mes del acto eleccionario y con tres fechas claves por jugarse (Ríver, Vélez y Platense) el abanico político es muy amplio y poco claro. Hoy hay varios pre-candidatos en danza, pero muchos aún buscan alianzas ante el delicado momento que vive el club. Usina Tripero cuyo principal nombre es el empresario Carlos Anacletto, que ya supo ser dirigente en la época de Juan José Muñoz es una de las agrupaciones que están lanzadas; como “Gimnasia somos todos”, que postula a Edgardo Medina (Toto Pueblo) hombre vinculado a la hinchada; “Legado Gimnasista” (Diego Patiño), “Renacimiento gimnasista” (Emanuel Di Loreto), “Queremos a Gimnasia” (Sebastián Gubia), “Alternativa Tripera” (Juan Larraza) y “Arriba Gimnasia” (el expresidente Daniel Onofri).
El club atraviesa un déficit mensual de 300 millones de pesos mensuales y un pasivo que oscila los 12 millones de dólares. que según la actual comisión representa un 40 por ciento menos de deuda que cuando asumieron hace 3 años, mientras que se remarcó que se invirtió 3 millones y medio de dólares en obras en el estadio del Bosque, se realizó la mayor inversión en divisiones juveniles y se pusieron en valor obras y sectores del club que estaban paralizados.
Lo concreto es que Gimnasia en un mes se juega la permanencia en primera división y los socios deberán elegir entre una oferta política, por ahora amplia y heterogénea, sin oficialismo a los que comanden el club en el próximo período de tres años e intente sacarlo de un novel de letargo preocupante.
La cancha y las urnas, los dos lugares que el Lobo vivirá a máxima intensidad en los próximos 30 días.