Este año tuvimos la inmensa alegría de estar otra vez en el aire con nuestro querido Eco Deportivo, un programa emblemático en La Plata en la década del 80. Hoy todos los sábados al mediodía en CNN Radio La Plata FM 100.9. Todo un clásico. Y hablando de clásicos… se nos viene un nuevo Estudiantes-Gimnasia.
Será este domingo a las 15 en UNO. La fiesta popular más importante que puede ofrecer la capital de la provincia de Buenos Aires. El arbitraje estará a cargo del mejor del país, Facundo Tello y durante dos horas el ritmo de La Plata se alterará, las pulsaciones de las diagonales serán distintas y los corazones latirán acelerados.
Los dos llegan con la obligación de cumplir objetivos. Estudiantes tiene la necesidad de ganar por ser local, porque tiene que afianzarse en la zona de playoff y debe sumar para al menos poder jugar la Copa Sudamericana en 2026. De lo contrario el balance del año será negativo. Además el entrenador Eduardo Domínguez está en evaluación y su continuidad no está asegurada.
Gimnasia afrontará el clásico con una racha negativa de 22 años sin ganar como visitante y en una semana donde despidió a Alejandro Orfila, el quinto DT de la gestión Cowen que está a poco más de un mes de terminar. Fernando Zaniratto, técnico de la reserva que se hizo cargo en forma interina hasta el final del torneo.
El Pincha más allá de sus altibajos tiene un mejor equipo, mejores individuales pero su rendimiento es muy ciclotímico, inestable. Le cuesta hacer goles y mantener su arco en cero. Jugó 44 partidos en el año y recibió 35 goles en contra. Si los de Domínguez ganan las aguas bajarán calmas y complicarán con la permanencia a su eterno rival.
El Lobo centrará toda la responsabilidad en sus jugadores. Ya no está Orfila y los ojos estarán puestos en los de pantalón corto. Un triunfo les asegurará jugar en primera el año próximo y complicar a su rival para lograr los objetivos que le quedan por delante. Para eso tendrá que jugar mejor y apuntará a un juego aguerrido y luchado para emparejar equivalencias. Gimnasia tiene el gran problema de generar poco juego y de ser mandíbula frágil en defensa. Los números del año son pésimos. Solo ganó 9 de 30 encuentros disputados.
Todo está juego, mucho más que tres puntos, está en disputa el orgullo, la “cargada” posterior y mirar el futuro mejor. Más allá de los favoritismos, donde el local corre con ventaja el fútbol es impredecible. Hagan juego. La fiesta está por comenzar. Que sea en paz.